EL RENACER DE LA FIESTA
Después de dos años prácticamente sin fallas, este fue esplendoroso, pues se plantaron más de 30 fallas en la ciudad. El Ayuntamiento bajó el impuesto a 10 Pts. por falla que tenían que acompañar un permiso, un croquis y dos llibrets por falla para poder plantar. 5 Pts. por tocar la música y 50 Pts. por tirar un castillo de fuegos artificiales.
La revista La Traca tuvo una brillante idea ese año y creó unos premios para las fallas que consistían en pagarles la Música o la Traca a las mejores fallas por suscripción popular de los Pepes y Pepitas.
No aparece nuestra falla entre las treinta que se plantaron ese año, puede que se plantara con otro nombre como ya había ocurrido otras veces.